Como Centro Cultural Museo y Memoria de Neltume, declaramos nuestra preocupación ante el ataque a la Casa de la Memoria de Atacama, en Copiapó, por un individuo que lanzó un artefacto de ruido y realizó rayados con consignas fascistas. Con esta vandalización, ya son siete los atentados contra Sitios de Memorias protegidos por la Ley 17.288, en calidad de Monumento Histórico Nacional.
Es fundamental enfrentar el avance de los discursos y las organizaciones fascistas, las cuales están creciendo en convocatoria entre la juventud precarizada y despolitizada de nuestros países. Bolsonaro, Bukele, Milei, Kast, entre otros, han capitalizado electoralmente esta situación.
El fascismo puede ser comprendido como una radicalización de las posiciones tradicionales de la derecha. Es, por lo tanto, una expresión de la ultraderecha. En términos económicos significa ausencia total del Estado (fin de cualquier tipo de leyes laborales, subsidios, etc.); en términos políticos significa más Estado para labores represivas y de control social; en términos culturales significa promoción de instituciones y tradiciones conservadoras.
Convocamos a los sitios de memorias para desarrollar un trabajo planificado de educación en materia política en el marco de una cultura de los derechos humanos, que responda al crecimiento del negacionismo, abordando seriamente el auge de la ultraderecha, e impulsando proyectos de transformación social, alternativos al neoliberalismo y su radicalización fascista.
AL FASCISMO SE LE DISCUTE Y SE LE COMBATE